Segunda victoria a domicilio, otra vez que “juntamos”
dos victorias seguidas, y las cosas que, como
también reflejamos en la crónica, parece que empiezan a carburar, que le
quipo da una imagen de mas seguridad y que parece que vamos acertando con la “tecla”.
Y sobre todo, lo más importante, aparte de la casi- seguridad defensiva que
mostramos ( aun concedemos ocasiones pero cada vez menos) , es la solvencia que
demostramos, esa sobriedad, ese saber estar, aprovechar las ocasiones y ser un
equipo serio, rocoso, incomodo para los rivales. Y victoria importantísima, que nos relanza, y
cómoda, pero sobretodo, victoria de confianza y de saber a que jugamos.
Parece que el sistema se va afianzando, que es la
forma de jugar que mejor nos va, al menos para los jugadores de los que ahora
disponemos, con un “mariscal” atrás como Forlin que se va asentando, con unos
carrileros mucho mas “liberados” y que pueden llegar arriba, con un centro del
campo en el que se ve mucho mas compromiso, incluso con un chaval como Yeboah,
que ve que para jugar “hay que currar”, y con un Linares adelante, no me duelen
prendas en decirlo porque era uno de los que le veía “para poco”, que nos está
dando mucho. Y no solo en los goles, que también, sino en el trabajo que
realiza, en el abrir huecos, en el “jugar de espaldas”, en el “fijar” a los centrales
rivales. Y encima, esperemos que de una vez por todas, en que vamos recuperando
efectivos “para la causa”, y cada vez la enfermería tiene menos inquilinos.
Decíamos
que estos últimos partidos del año, antes de las fiestas navideñas, podrían ser
nuestro “termómetro” para ver a que somos capaces de aspirar. No conviene
lanzar mucho las campanas al vuelo, pero está claro que este último mes y
medio, sobre todo desde el partido del Lugo, el equipo ha dado un paso
adelante.
Y el sábado, en tierras murcianas, salíamos con la
misma defensa de 5, con Mossa y Diegui mucho mas de carrileros, otra vez con
Rocha y Folch de pivotes, con Saúl en una banda, Yeboah que se lo había ganado
en la otra y con Linares arriba. Y el partido comenzaba bien, con un Real Oviedo bien situado, sin apenas
conceder nada al Lorca, y jugando con criterio y llegando. Y así, en un córner
que realmente no se había producido, Saúl que la pone magistralmente y Rocha
que empala poniéndonos por delante. Y al contrario de otras veces, donde tras
ir por delante, siempre dábamos ese pasito atrás, el sábado seguimos jugando con “cabeza”, teniéndola y sin apenas
dejar ocasiones al rival. Y en otro fenomenal centro de Saúl, Linares que no
llega, toca en el poste, y el aragonés que recoge el rechace para hacer el segundo.
Y la segunda parte, escasas llegadas, futbol control del Real Oviedo, muy serio,
prácticamente sin conceder ninguna ocasión y sin embargo, Linares que casi tuvo
el tercero. Pero partido muy serio, muy sobrio, y triunfo para la ilusión.
Y el próximo fin de semana, otro de esos partidos
que nos va a seguir diciendo las aspiraciones. Llega otro de los gallitos de la
competición, otro de esos equipos llamados a luchar por el ascenso directo: el
Osasuna. Y aunque la verdad, es que en el Tartiere, los de arriba, se nos
suelen dar bien, habrá que luchar y pelear mucho para que los tres puntos se
queden aquí. Pero al menos la ilusión, nos hace ver las cosas de otro color.
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